Comienza tu día en la ciudad de Nueva York en Central Park, que posiblemente sirve como el destino más icónico de la ciudad. Da un paseo por Turtle Pond, toma fotografías de algunas de las hermosas estatuas, siéntate un rato en el Jardín de Shakespeare y da un paseo en el carrusel. Encontrarás quioscos de información en todo el parque, así que no dudes en detenerte para obtener un mapa o un consejo.
Luego, dirígete a Coney Island, en Brooklyn. Es el lugar perfecto para visitar en primavera y en verano, gracias a la hermosa playa y a las abundantes atracciones de feria. No olvides comprar una bolsa de palomitas de maíz para que no tengas hambre mientras paseas por el malecón. Súbete a la Rueda de la Fortuna o pon a prueba tu temple en la montaña rusa Cyclone.
Finalmente, sube a bordo del ferri de Staten Island para visitar este emblemático distrito de la ciudad de Nueva York. Es la localidad ideal para los amantes de la historia y la cultura, especialmente si te gusta explorar las exposiciones en museos. Ya sea que estés con niños o adultos, haz una parada en el Zoológico de Staten Island. Ofrece 3 hectáreas de exhibiciones de animales, desde nutrias hasta suricatos.
Puedes trasladarte por los cinco distritos en transporte público, pero alquilar un auto te dará la mayor flexibilidad para moverte según tu agenda. Si estás aquí por unas vacaciones prolongadas, considera dedicar uno o más días a cada uno de los distritos para que puedas descubrirlos a fondo.